Borges Pirata
Dentro del género del mexicano, hay una enorme diversidad de especies según su clase social, ubicación geográfica y afiliación política. Con el interés de adecuadamente representar la riqueza de la biodiversidad social de México, resulta necesario el uso de subespecies que tomen en cuenta las interseccionalidades que permean al mexicano. No hay mejor ejemplo de esta diversidad que el famoso fresa mexicano (Mexicanum fragum).
El Mexicanum fragum es una especie del mexicano nativa de la capital del país y la zona metropolitana. Su estatus socioeconómico es de clase media alta a alta y es considerada por las otras especies como invasora, pues siempre que se asienta en una zona, los precios de vivienda y comida se elevan a niveles astronómicos. Otra importante distinción del fresa mexicano a otras especies es su manera de hablar, puesto que muchas veces emplea el inglés para reemplazar ciertas palabras que podrían ser perfectamente dichas en español. Por otro lado, su manera de enunciar su lengua natal puede ser descrito como “cantadito” que generalmente involucra la prolongación de la última vocal de una frase o palabra. De igual manera, abusa excesivamente de la palabra “güey”. Por ejemplo, mientras que otras especies dirían “¿Cómo estás?” el Mexicanum fragum le diría “¿Cómo estaaaas, weee?”.
Esta especie se subdivide como: Fresa de Coyoacán (Mexicanum fragum Coyoacanum), Fresa de la Roma (Mexicanum fragum Romae), Fresa de Polanco (Mexicanum fragum Polanci), Fresa de Coapa (Mexicanum fragum Coapae) y Fresa de Satélite (Mexicanum fragum Satelitatae)¹. Estas últimas dos deberían ser consideradas como subespecies gemelas que fueron separadas al nacer.
El Mexicanum Fragum Coyocanum son los fresas que consideran tener consciencia de clase y de su privilegio después de haber leído el Manifiesto Comunista una vez.² Esta consciencia los hace tratar de disculparse de su privilegio cada vez que puedan sin la necesidad de actuar al respecto. Por otro lado, los fresas de Coyoacán suelen confundir el uso excesivo de la marihuana y ponerse playeras con la cara del Che Guevara con tener una personalidad. Una frase común de esta subespecie para expresar su desagrado ante una situación suele ser “me maltripea” o “que mal trip, güey”.
El Mexicanum Fragum Romae, coloquialmente conocido como Hipster, se caracteriza por su afán de ser único y diferente. Este deseo no nace de una posición política sino más bien por un profundo deseo de resaltar para auto validarse. Se le puede encontrar frecuentemente en tiendas de discos de vinilo sin necesariamente ser dueños de una tornamesa o en cafeterías cuyo menú está en inglés y que su precio raye en lo absurdo. Si se le preguntara por sus gustos musicales, responderían que Morrisey es un genio incomprendido.
El Mexicanum Fragum Polanci es la primera imagen que suele producirse al pensar en el fresa mexicano. La característica forma de hablar del fresa mexicano es especialmente notable en estos individuos y el uso frecuente de tarjetas American Express, polos Lacoste, zapatos Gucci y chamarras de pluma de ganso la hace especialmente identificable. A diferencia del Mexicanum Fragum Coyoacanum, esta subespecie no tiene consciencia alguna de su privilegio ni el deseo de tenerlo. Por lo tanto, su voto es exclusivamente para el PAN. Suele tener fotos en su Instagram de la primera y única vez que se subió al metro y sigue impresionada de que se abren las puertas de los dos lados en la estación Chabacano. Por otro lado, va más a eventos de Fórmula Uno que al supermercado, pues tienen a una empleada encargada de eso, y se les suele atribuir frases como “el pobre es pobre porque quiere” y “mi chofer nos lleva a Ragga³, güey”.
Dada la estrechez que hay entre el Mexicanum Fragum Coapae y el Mexicanum Fragum Satelitatae, ambas pueden ser descritas paralelamente. Las dos se caracterizan por ser la transición económica de clase media baja a alta por lo que su manera de actuar es comparable con lo que coloquialmente se conoce como “chakalón”. Pueden ser fácilmente identificadas por su uso de “papos”⁴ Nike, pantalones rotos, gorras de los Bulls de Chicago que se ponen chueco a propósito y playeras Guess. Las dos subespecies divergen en que el Mexicanum Fragum Satelitatae no sabe manejar en comunidad y su lugar favorito para convivir es Mundo E⁵. Por otro lado, tienen una profunda nostalgia por el viejo PRI.
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¹ El nombre de las subespecies no refleja necesariamente el lugar de origen del fresa sino más bien las ubicaciones en donde más se encuentran los individuos pertenecientes a la subespecie. Es decir que, por ejemplo, un fresa que vive en Coyoacán puede ser categorizado dentro de la subespecie Mexicanus Fresus Coapae.
² No necesariamente haberlo leído. También se lo pudieron haber contado o lo vió en un video de YouTube de 5 minutos.
³ Antro en Polanco.
⁴ Zapatos o tenis.
⁵ Plaza comercial en Ciudad Satélite.
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